La asignatura es un trayecto imprescindible en nuestra formación como enfermeras/os, licenciadas/os en enfermería. Nuestra disciplina exige una articulación armoniosa entre el pensar, el hacer, el sentir,  “en el pensar haciendo” y “en el haciendo pensar”. Este tramo académico es el primer contacto de los estudiantes con una modalidad de aprendizaje experiencial presente a lo largo de toda la carrera. Los diferentes  escenarios de  habilidades procedimentales serán similares a los que se vivencian cotidianamente en un centro de atención del primer nivel. El encuentro con la práctica, con los materiales, con las situaciones, los procedimientos,  las técnicas básicas que forman parte del cuidado de enfermería para el logro de habilidades en aquellos que se relacionan con la valoración de las personas y grupos y la aplicación de los principios de bioseguridad que garanticen un cuidado seguro, despierta en los estudiantes movilizaciones, conflictos, inseguridades  que  requieren  del diseño de nuevas estrategias didácticas, la simulación clínica,  donde los estudiantes puedan recrear teniendo en cuenta aspectos cognitivos, éticos, normativos en un ambiente predecible, estandarizado, reproducible y  seguro. Un espacio académico que medie y prepare para la experiencia de campo.


Esta  materia pretende en primer lugar, recuperar la perspectiva histórica para comprender las condiciones materiales sobre las que se construyeron las valoraciones e instituciones de salud en cada momento. Y en segundo lugar, aproximar al estudiante al estudio del Estado que representa el  espacio desde el que se producen  relaciones de determinación hacia los espacios particular y singular  en los que se producen y reproducen situaciones de salud-enfermedad-atención (SEA)